Una intensa ola de calor se reporta en el centro de Estados Unidos, extendiéndose desde las llanuras y el medio oeste hasta la costa del Golfo y el sureste. Hasta el 24 de agosto, 18 estados se encontraban bajo advertencias de calor excesivo.
El Centro de Predicción Meteorológica (WPC) advirtió que el calor opresivo en el Medio Oeste planteaba un riesgo para la salud mayor de lo habitual. Esto se debe a la persistencia de varios días consecutivos de calor extremo, la intensidad de las temperaturas y la falta de enfriamiento durante las noches.
La recomendación para la población es evitar el ejercicio al aire libre durante las horas más calurosas del día, beber mucha agua y usar ropa ligera. El NWS también aconsejó a los residentes en zonas con temperaturas extremadamente altas que busquen refugio en lugares climatizados como centros comerciales o bibliotecas públicas. Además, instó a los ciudadanos a mantenerse informados sobre las condiciones meteorológicas locales para prevenir posibles complicaciones relacionadas con el calor.
