Las autoridades de Islandia declararon estado de emergencia en el sur del país debido a una erupción volcánica, la cuarta registrada desde diciembre en la península de Reykjanes. Los habitantes de la pequeña ciudad de Grindavik y la Laguna Azul un sitio turístico, fueron desalojados.
El servicio de defensa civil del país informó que la erupción comenzó la mañana del sábado, entre Hagafell y Stora-Scogfell, al norte de Grindavik. Una erupción similar ocurrió en el mismo lugar el pasado 8 de diciembre.
Aunque el espacio aéreo de Islandia sigue abierto, un gigantesco derrame de lava ocasiona grandes nubes de humo.
La Agencia Meteorológica de Islandia informó que el período previo a la erupción fue breve y una evaluación inicial indicó que estaba emergiendo la misma cantidad de magma que en diciembre. Añadió que debido al mal tiempo afectaría el monitoreo de la zona.
El aeropuerto internacional de Keflavik y otras terminales aéreas no se han visto afectados por la explosión; la Laguna Azul se mantendrá cerrada hasta nuevo aviso.
A los 4 mil residentes de Grindavik se les permitió regresar a sus hogares hace apenas un mes, después de que una erupción en enero provocó la destrucción de tres casas por lava.
Islandia tiene 33 sistemas volcánicos activos y se asienta sobre lo que se conoce como la Cordillera del Atlántico Medio, el límite entre dos de las placas tectónicas más grandes del planeta.
