Campaña de Recuperación de Coberturas de Vacunación 2024
Hasta el 31 de mayo se prevén aplicar 9 millones de dosis vs enfermedades infecciosas
La Secretaría de Salud exhortó a los padres de familia y/o responsables tutores o cuidadores, llevar a vacunar a los menores de edad, así como a iniciar o completar los esquemas de inmunización, esto durante la Campaña de Recuperación de Coberturas de Vacunación 2024, que termina el 31 de mayo en las 32 entidades federativas.
El objetivo es alcanzar 90 por ciento de cobertura de vacunación para disminuir riesgos a la salud de infancias y adolescencias y evitar que se reintroduzcan los virus de poliomielitis, sarampión y rubéola. La estrategia contempla la aplicación de nueve millones de dosis.
Las vacunas que se suministran son poliomielitis (hexavalente); sarampión, rubéola y paperas (SRP), y sarampión-rubéola (SR), así como aquellas que previenen otras enfermedades infecciosas.
Como parte de la recuperación de la cobertura, se tiene previsto vacunar a niñas, niños y adolescentes con esquema incompleto. Se sugiere a madres, padres y personas tutoras o cuidadoras presentar la Cartilla Nacional de Salud en los centros y clínicas de salud, para revisar si les hace falta alguna vacuna.
El esquema de vacunación contra sarampión es de dos dosis: la primera a los 12 meses cumplidos y la segunda a los 18 meses o los seis años, según el año de nacimiento de la persona a vacunar. Niñas y niños nacidos antes de 2022, se aplica la segunda dosis a los seis años.
Los centros de salud de las 32 entidades federativas cuentan con vacunas SRP para aplicarse a niñas y niños de uno a nueve años, y SR para adolescentes de 10 a 19 años. Estas vacunas sólo se suministran a la población de las edades referidas para iniciar o completar las dosis.
El virus del sarampión se encuentra en las secreciones mucosas de la nariz y la faringe; el contagio ocurre cuando la persona enferma tose o estornuda y las gotitas de saliva que expulsa penetran por las vías respiratorias de quienes no han sido vacunadas y que no han padecido esta enfermedad.
El periodo de incubación en el organismo es de una a tres semanas, y la transmisibilidad se da cuatro días antes y cuatro días después de comenzar la aparición de las ronchitas en el cuerpo, éstas permanecen de cuatro a siete días y desaparecen mediante descamación.
El cuadro clínico se caracteriza por la presencia de fiebre, manchas rojizas y elevadas sobre la superficie de la piel que se distribuyen de cabeza a extremidades y se acompañan de irritación ocular (conjuntivitis), catarro tipo rinitis, tos y podrían observarse manchas pequeñas con centro blanco en mucosa bucal.
Por ser viral, el sarampión no requiere tratamiento antibiótico, a menos que se presenten complicaciones como neumonía bacteriana. En todos los casos debe proveerse nutrición adecuada e ingesta de líquidos para prevenir casos de deshidratación.
Las complicaciones más frecuentes por sarampión son: otitis media, neumonía, larinagotraqueobronquitis, encefalitis y diarrea grave. La estrategia de vacunación contribuye a evitar que se registren casos autóctonos de sarampión en el país.