Putin viaja a Mongolia pese a amenaza de arresto para garantizar el bombeo de gas a China
Moscú, 2 sep (EFE).- El presidente ruso, Vladímir Putin, viajó a Mongolia en su primera visita a un país que ha ratificado el Estatuto de Roma, el tratado fundador de la Corte Penal Internacional (CPI), que ordenó su arresto por crímenes de guerra en Ucrania.
Putin nunca había corrido tales riesgos desde que La Haya emitiera la orden en marzo de 2023, pero la necesidad de rutas alternativas para el gas ruso con destino a China es una cuestión de vida o muerte para Rusia y su economía de guerra.
En los últimos 18 meses Putin renunció a viajar a ciertos países por ese mismo motivo, siendo el caso más flagrante la cumbre del grupo BRICS que se celebró en agosto del pasado año en Sudáfrica, en la que fue el gran ausente.
La CPI y Ucrania piden a Mongolia que detenga a Putin
La CPI no se anduvo por las ramas y el viernes pidió oficialmente a Mongolia, que firmó el tratado en el año 2000 y lo ratificó en 2002, que coopere con ese tribunal y detenga al presidente ruso.
“Los Estados Parte del Estatuto de Roma de la CPI tienen la obligación de cooperar de conformidad con el Capítulo IX del Estatuto de Roma, mientras que los Estados no Partes pueden decidir cooperar de manera voluntaria”, subraya.
El tribunal alertó que “en caso de falta de cooperación, los jueces de la CPI pueden informar de ello a la asamblea de los Estados Parte, que a continuación adoptaría “las medidas que considere apropiadas”.
Ucrania también se sumó a la campaña y expresó su esperanza de que “Mongolia entienda que Putin es un criminal de guerra”.
“El secuestro de niños ucranianos es sólo uno de los muchos crímenes por los que Putin y el resto de dirigentes políticos y militares de Rusia deben afrontar justicia”, informó el Ministerio de Exteriores ucraniano.