Cd. de México, 21 oct (Crisol).- Estar sentado nos está matando. Y es literal. El oficinista promedio permanece regularmente más de ocho horas sentado, lo cual es una postura antinatural y poco sana para nuestro organismo.
La llegada de la innovación tecnológica a la oficina ha significado en la mayoría de los casos un fabuloso aumento de la productividad. Sin embargo, estos beneficios traen a la par muchos riesgos para la salud.
La mayoría de empleados de oficina pasan el día sentados entre el trabajo, el coche y el autobús, todo ello, sumado a un mal estilo de alimentación, está detonando un alto número de personas con obesidad, con el consecuente riesgo de padecer diabetes o alguna enfermedad cardiovascular.
De acuerdo con estudios elaborados por la Asociación Médica de Estados Unidos, permanecer ocho horas sentados puede provocar enfermedades como: degeneración muscular, enfermedades cardíacas, diabetes, cáncer de colon, problemas de la columna, degeneración muscular y osteoporosis.
Regularmente las personas que trabajan en una oficina se pasan toda la jornada sentados, lo que es muy dañino para la salud. Lo más recomendable es tomarse unos minutos cada hora para caminar un poco, cambiar la postura eventualmente e, incluso, hacer algún ejercicio en la propia silla.
El mantenerse sentados varias horas propicia que los músculos de las piernas se debiliten y se tensen, además la circulación sanguínea se dificulta y puede ocasionar dolor por falta de uso.
La falta de actividad física provoca que el organismo queme menos grasa y la sangre fluya más lentamente, lo que deteriora el sistema cardiovascular y altera el nivel de grasa que se encuentra en la sangre.
El sedentarismo al que están atados millones de oficinistas los convierte en posibles candidatos a padecer obesidad y aumenta, a su vez, las probabilidades de padecer diabetes. El movimiento corporal aumenta el flujo sanguíneo y favorece la liberación de diversos químicos que ayudan a la función cerebral.
Además, moverse regularmente provoca la liberación de antioxidantes, los cuales eliminan los radicales libres que son los que regularmente atacan a las células y derivan en algún tipo de cáncer.
Estudios médicos aseguran que dejar de mover la espalda por mucho tiempo provoca que la columna vertebral pierda flexibilidad y sea más susceptible a lastimarse con cualquier actividad y aumenta el riego de desarrollar hernias en los discos lumbares.
Las piernas son otra de las partes del organismo que resultan más afectadas por permanecer varias horas sentados. Cuando el cuerpo se mantiene activo los huesos se engrosan para facilitar la actividad, de lo contrario, el organismo prefiere “ahorrar” recursos y los músculos y huesos se debilitan, haciendo más fácil la posibilidad de desarrollar osteoporosis o algún problema muscular.
Algunos tips para ejercitarse en la oficina:
-Si tiene un teléfono fijo inalámbrico o celular aproveche para caminar por la oficina.
-Utilice preferentemente las escaleras en vez del elevador.
-Si va a comer fuera de la oficina, aproveche para caminar y prefiera lugares que estén un tanto retirados para que el paseo sea más largo.
-Por muy concentrado que esté realizando un trabajo, levántese unos minutos por lo menos cada hora y media.
-Aprenda a realizar sencillos ejercicios que pueden hacerse incluso en la misma silla (de movilidad, flexibilidad y respiración).
-Lleve consigo a la oficina una pelota anti estrés para mover las manos de vez en cuando.
