Cd. de México, 19 nov (Crisol).- El fenómeno meteorológico conocido en Europa como Depresión Aislada en Niveles Altos (DANA), que hace unas semanas golpeó severamente Valencia, España, y dejó inundaciones, destrucción de infraestructura y al menos 200 muertos, difícilmente se podría presentar en México, aseguró el investigador de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Víctor Manuel Torres Puente.
La DANA, explicó, se genera en las capas medias y altas de la atmósfera donde una masa de aire polar se queda aislada de la circulación de la atmósfera. “Es frecuente que estas capas bajas segregadas se trasladen hacia latitudes más tropicales, zonas más cálidas, en donde producen precipitaciones intensas”, detalló.
Torres Puente agregó que usualmente se presenta en verano y otoño, puede durar varios días y además de las fuertes precipitaciones provoca disminución de temperatura y un ambiente inestable.
Su potencial destructivo, abundó, depende de la intensidad de estas tormentas, así como de los contrastes térmicos en superficie y de la topografía del lugar. En el caso de Valencia, su efecto fue importante porque es una zona bastante montañosa rodeada por humedad y ello lo alimentó, provocando que hubiera una precipitación muy intensa.
El investigador del Instituto de Ciencias de la Atmósfera y Cambio Climático de la máxima casa de estudios rememoró que antes del evento de la provincia española, sucedió un fenómeno ligado a DANA en Marruecos, donde también hubo efectos devastadores, pues el desierto del Sahara se inundó por las lluvias intensas y hubo afectaciones cercanas en zonas montañosas.
“En Europa tienen la mejor predicción del mundo en esta área. La información llegó correctamente a nivel del gobierno español, pero hubo desinformación o no leyeron los boletines en la zona de Valencia, lo que cooperó al desastre”, consideró el universitario.
Mencionó que en Norteamérica este fenómeno se denomina “Baja Segregada”. Recordó que en México se registró en 1967 y en 2016 en invierno, y en lugar de inundaciones trajo consigo nieve, “en la primera fecha nevó en la Ciudad de México, algo sumamente inusual, y en la segunda, zonas secas como Querétaro tuvieron hielo y nieve”.
El especialista recomendó profundizar los estudios meteorológicos y tener más datos de largo plazo para saber qué pasará con el clima, pues además de los fenómenos recurrentes existen factores, como el cambio climático, que deben estudiarse a detalle para saber si intensifican los sucesos meteorológicos como ha sucedido con los más recientes huracanes.
Por ello, el científico consideró esencial que la ciudadanía tenga la responsabilidad de informarse. “El Servicio Meteorológico Nacional, dependiente de la Comisión Nacional del Agua, realiza pronósticos semanales accesibles para el público en general y debemos estar atentos a lo que puede suceder en nuestra región”.
