Documental sobre Tenochtitlan gana premio en Madrid
Entrelaza la vida cotidiana y la historia imperial del pueblo mexica
Cd. de México, 26 nov (Crisol).- “Tenochtitlan: ciudad viva”, un documental en el que se entrelazan la vida cotidiana y la historia imperial del pueblo mexica, fue galardonado con el Premio del Público de la Muestra de Antropología Audiovisual de Madrid, entre una decena de largometrajes de países de cuatro continentes.
El documental, producido por la Sociedad Mexicana de Geografía y Estadística, invita a realizar un viaje de más de 500 años al pasado, para repasar el nacimiento y auge de una urbe fundada en el corazón del lago de Texcoco, por los mexicas, los últimos en aparecer en la Cuenca de México, alrededor del año 1300 después de Cristo.
La Secretaría de Cultura, mediante los testimonios de especialistas del Instituto Nacional de Antropología e Historia, contribuyó a armar este relato que pone énfasis en la resiliencia de una cultura eminentemente bélica.
El director del trabajo, Luis Fernando Gallardo León, quien dos años antes produjo “La conquista de Tenochtitlan: un nuevo relato”, se centra en la vida de una metrópolis que creció gracias al aprovechamiento del sistema chinampero, así como a la construcción de calzadas hacia los cuatro rumbos y de acueductos, que permitieron separar las aguas dulces de las salobres del lago.
La supervisión de “Tenochtitlan: ciudad viva” estuvo a cargo de Ismael Arturo Montero García, miembro de la Sociedad Mexicana de Geografía y Estadística y se nutre con entrevistas a diversos arqueólogos, investigadores, historiadores y activistas en la defensa del patrimonio biocultural de Xochimilco.
Las recreaciones 3D permiten al espectador viajar a las entrañas del Templo Mayor (una pirámide doble dedicada a la adoración de Huitzilopochtli y de Tláloc, las principales deidades de los tenochcas), remar en los canales de la ciudad (flanqueados por ahuehuetes) o asistir al Huizachtépetl (Cerro de la Estrella, en Iztapalapa), donde cada 52 años tenía lugar la ceremonia del Fuego Nuevo, el Xiuhmolpilli (atadura de años), que significaba el final de un ciclo y el inicio de otro, con el surgimiento del sol y el renacimiento del mundo.
El documental también ayuda a mirar con nuevos ojos las colecciones arqueológicas de la Sala Mexica del Museo Nacional de Antropología y de los museos del Templo Mayor y de Tenayuca, al no solo descifrar los conocimientos vertidos en las piedras del Sol y de Tízoc, sino admirar las delicadas técnicas de la cerámica doméstica.