Al cierre del primer trimestre de 2024, las aseguradoras han pagado más de 11 mil 200 millones de pesos por concepto de indemnizaciones y anticipos a los asegurados afectados por el paso del huracán Otis, que impactó la costa de Guerrero en octubre del año pasado.
La Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros (AMIS) informó que, de éstos, el 61% corresponden a seguro de daños (25 mil 134 reportes de viviendas, hoteles, restaurantes y otros), mientras que el 39% son de autos (16 mil 27 reportes).
Las estimaciones de daños de los bienes asegurados ascienden a 37 mil 384 millones de pesos (aproximadamente dos mil 075 millones de dólares), cifra que podrá actualizarse en función de los avances en la reconstrucción en curso, precisó en un comunicado.
Así, Otis se ubica como el segundo huracán más catastrófico en el país, superando a Odile, cuyo impacto alcanzó los mil 460 millones de dólares, pero por debajo de Wilma con dos mil 714 millones de dólares, que es el segundo más caro.
Los daños de viviendas aseguradas son de nueve mil 676 millones de pesos, es decir, poco más de uno de cada cuatro pesos serán por pérdidas aseguradas (26%).
Refirió que el promedio de daños asegurados en vivienda es aproximadamente de 1.2 millones de pesos por vivienda, con un costo medio de pagos por avances e indemnizaciones del 33%.
Señaló que las viviendas aseguradas cuentan con diversas coberturas que se activan en función de las condiciones contratadas, incluyendo pólizas que cubren daños al edificio por Riesgos Hidrometeorológicos, contenidos de los inmuebles, o ambas situaciones.
En cuanto a los hoteles, las estimaciones de los daños ascienden a ocho mil 194 millones de pesos. En este rubro se han otorgado dos mil 400 millones de pesos en anticipos a los 106 hoteles asegurados con daños.
Los pagos o anticipos promedio son de 22.6 millones de pesos, pero existen hoteles asegurados con alta capacidad de ocupación cuyos anticipos superan los 60 millones de pesos.
