Conmovedor concierto benéfico de Serrat en el puerto de Mahón
Mahón, 24 nov (EFE). – A sus 82 años y tres después de su retirada de los escenarios, Joan Manuel Serrat actuó el fin de semana por una causa benéfica en el Teatro Principal de Mahón, la ciudad que le otorgó la Medalla de Oro, donde tiene casa desde hace 40 años y en cuyo puerto esparció las cenizas de su madre.
Durante una hora y cuarto, el noi del Poble-Sec desgranó, junto a Josep Mas ‘Kitflus’ y el guitarrista David Palau, buena parte de los éxitos que marcaron su carrera, interpretados en esta ocasión a beneficio de las misiones humanitarias de la Fundación Clarós, de la que es patrono.
La gala, que se inició con la actuación lírica a canto y piano de Rame Lhaj, Marcelina Román, Iryna Zhytynska y Gayane Mnatsakanyan, fue coronada por Serrat, cuya intervención emocionó y levantó de sus asientos a las cerca de 850 personas que llenaban por completo el teatro.
El cantautor abrió con la ‘Cançó de bressol’ que en 1967 dedicó a su madre y continuó con ‘Cançó de matinada’ y ‘De vez en cuando la vida’, antes de que la canción protesta ‘Para la libertad’ retumbara con fuerza pocos días después de conmemorarse el 50 aniversario de la muerte de Franco.
Con un público entregado y su voz poderosa y cargada de emotividad, Serrat interpretó ‘Mo’, ‘Mediterráneo’ y ‘Aquellas pequeñas cosas’.
Con formato de trío y en acústico, tomó la guitarra para retar a los “hombres de paja” que atormentan la vida y con quienes tiene ‘Algo personal’, y para lanzar el clamor ecologista de ‘Pare’ porque “están matando la tierra”.
Cerró el concierto “golpe a golpe, verso a verso” con el ‘Caminante no hay camino’ de Machado y respondió a la petición del público para corear al unísono ‘Paraules d’amor’ y el ‘Me’n vaig a peu’ con el que se despidió del escenario




